Masturbarse a solas no es recomendable desde el punto de vista de la energía sexual. Aunque se ha publicado poco sobre el tema y la sexología contemporánea parece apuntar a lo contrario -que el autoerotismo es beneficioso para la salud sexual femenina-, nosotros no estamos de acuerdo y contamos con un amplio respaldo de casos clínicos que nos hacen pensar en la hipótesis de que acostumbrarse desde edades tempranas a alcanzar el orgasmo mediante la auto-estimulación erótica puede repercutir negativamente en la respuesta sexual de la fémina cuando mantiene encuentros sexuales en pareja.
No obstante, siempre que se practique en compañía de una pareja estable y comprometida, estimularse bien es todo un arte que no sólo puede aumentar el apetito sexual femenino y desarrollarlo, sino que también capacita a la mujer para conseguir cotas más altas de satisfacción (mejor excitación y orgasmos más intensos). Masturbar correctamente a una fémina puede incluso mejorar la salud global y ayudar al equilibrio hormonal femenino, según la medicina tradicional china y el taoísmo. Estimularla adecuadamente predispone a que se mantenga el deseo y la pasión, y es uno de los caminos para la satisfacción sexual continuada de la mujer y su pareja.
Esta técnica sexual en pareja puede realizarse en cualquier momento del día, y se optimizan sus resultados si previamente se realiza una técnica de relajación. Estas son algunas de sus ventajas:
1.- Puede mejorar en cierta medida la respuesta sexual femenina al hacer el amor en pareja: capacidad de excitarse, lubricación, deseo, intensidad y número de orgasmos.
2.- La vagina se desbloquea y puede hacerse más flexible, lo que redunda en más placer coital para ella y su pareja.
3.- Según la medicina china, cada parte de la vagina se corresponde con una zona de tu cuerpo. Si sólo se estimula el clítoris, puede llegar a crearse algún desequilibrio. Si por el contrario se estimula toda la vagina por fuera y por dentro, puede lograrse una estimulación equilibrada que repercuta en todo el cuerpo.
4.- La mujer aprende a disfrutar durante más tiempo y se descubren nuevas sensaciones, lo que puede ayudarle a conseguir multiorgasmos.
Cómo masturbar bien a una mujer
1.- Sin prisas, con lentitud y suavidad.
2.- Objetivo: el placer y el desarrollo de la intimidad y el erotismo en pareja. Se puede llegar al orgasmo, pero sin tenerlo como objetivo.
3.- Fantasías eróticas en pareja: sin miedo y con confianza. Comunicarse y decirse abiertamente lo que se desea abre las posibilidades a cotas más altas de placer y satisfacción mutua.
4.- Un secreto taoísta: estimular no sólo el clítoris, sino también toda la vagina por dentro, ayudándose o no de un vibrador, consolador o algún objeto con forma de falo puede multiplicar el gozo y las sensaciones. No hay que centrarse sólo en la vagina, sino explorar cada rincón del cuerpo, pues pueden descubrirse verdaderas fuentes de placer inesperadas.
Estos cuatro consejos que parecen simples, pueden aumentar la satisfacción sexual femenina y convertir a la mujer en multiorgásmica.