Presentamos hoy un caso muy interesante en el que un varón describe su atracción hacia el mismo sexo, a la vez que reconoce la amenaza que ello representa para la estabilidad de su matrimonio.
Se trata de un caso clínico difícil de abordar desde la sexología médica pues conlleva un dilema ético en sí mismo. En nuestra opinión, la mejor forma de intervenir en estos casos es una combinación de terapia individual y terapia de la pareja.
En el siguiente vídeo se define esta última y se presentan algunos casos en los que puede ser muy efectiva. Más adelante exponemos un caso clínico sumamente interesante de un hombre casado con una mujer, al que le atraen los varones.
¿Qué encontrará aquí?
Soy hombre y me atraen los hombres
Mi pasado bisexual
Buenas tardes, Dr., tengo un caso muy difícil, al menos para mí, tengo 10 años de matrimonio, antes de casarme tuve experiencias sexuales con hombres y mujeres, siendo con hombres tanto pasivo como activo, y con mujeres obviamente activo
Siempre he sido muy abierto a los temas de sexualidad y sexo, mi esposa es muy conservadora en estos temas, ella es muy reservada, ni siquiera lo conversamos, cuando tenemos relaciones solo nos tocamos y ya, lo hacemos algunas veces con intensidad y otra de forma muy básica.
El declive de nuestra sexualidad matrimonial
Con el pasar del tiempo nuestra actividad sexual se fue descuidando mucho, al punto de disminuir dramáticamente las relaciones sexuales, actualmente estamos en una relación a distancia lo que ha afectado más esta situación, nos vemos cada 3 ó 4 meses y por pocos días, y en esos días la actividad sexual es muy escasa.
Mi regreso al sexo con hombres
He tenido contacto sexual con hombres nuevamente puesto que la ansiedad y necesidad de sexo es grande, me gusta la pornografía, me excita hablar de sexo de toques, manoseos y todo lo que tenga que ver con el sexo, sin embargo, no sé si en realidad me siento atraído hacia mi mismo sexo, porque solo lo veo como algo momentáneo, morbo, sexo, pasión.
Interés en seguir con mi esposa
Sin embargo, con mi esposa me une algo que va más allá de todo eso, afinidad, amistad, afecto y por qué no, deseo sexual… Aún siento deseo sexual por ella, pero ella no me busca sexualmente como antes.
Cabe destacar que hace aproximadamente 5 años ella descubrió una situación de infidelidad que tuve con un hombre, es decir ella leyó unos mensajes donde acordábamos un encuentro, esto fue un gran problema entre nosotros, sin embargo lo superamos y nuestro matrimonio siguió adelante.
Nuevas complicaciones
Hace unas semanas en una conversación que tuve con un sobrino de ella (tiene 17 años) le comentaba a este chico, que me estaban ofreciendo hacer un trío, sin embargo, no estaba seguro de aceptar la propuesta.
Esta conversación la descubrió la mama del chico y como era de esperarse ella le informó a mi esposa y a toda la familia lo que estaba pasando; obviamente este es otro tema, lo comento para hacer más clara la situación actual.
Mis apetitos sexuales hacen peligrar mi matrimonio, ¿qué hago?
No sé si este tema sea para buscar ayuda sexológica o psicológica, lo cierto es que veo que mis deseos sexuales están poniendo en riesgo mi matrimonio.
Tenemos una hija y no quiero separarme de mi esposa y me gustaría ver si alguien puede darme alguna orientación sobre qué puedo hacer; agradecería su valioso comentario al respecto.